El Presidente Peña Nieto, cumplió su primer año de gobierno y, en su discurso expresó cinco conceptos: 1) Un México en paz, y lo que tenemos es un México sin tranquilidad por la ausencia de seguridad en todo el país, claro que hay paz en los sepulcros clandestinos que a diario se descubren, incluyendo los de La Barca que, por cierto, están a unos metros de una zona militar. 2) Habló de un México incluyente y, con todo y el pacto, no ha logrado incluir en su proyecto de gobierno a la mayoría de los mexicanos porque sus reformas estructurales son excluyentes como la laboral y la educativa, reformas que están convulsionando al país desde Sonora hasta Yucatán, reflejándose en el zócalo de la Cd. De México. 3) En cuanto a la reforma educativa, expresó que vamos por un México con educación de calidad y la reforma educativa que le aprobaron los legisladores medio dormidos, de acuerdo a los científicos y académicos, no es para una educación de calidad, es para controlar al magisterio con la idea de que el PRI en 2018 siga en el poder y manejar los recursos del magisterio desde Los Pinos. 4) Habló de un México prospero y si, tenemos una treintena de empresarios mexicanos que después de la firma del TLC se les entregaron las empresas del pueblo, concentrado la riqueza de manera ya escandalosa, generando la pobreza de manera alarmante, ahí está el programa del Presidente que reconoce 7 millones de pobres. 5) Una frase que llama la atención es cuando dice que “ahora tenemos un México con responsabilidad global”, esta es una frase etérea del más fino corte salinista; deseamos entender que encierra los 6 discursos que ha pronunciado en igual número de giras internacionales, en donde habla de la globalización económica como una panacea para convertir a México en un Jauja solamente imaginario.

El primer año de gobierno en el aspecto económico lo cerramos de luto, se le fue al Presidente en viajes internacionales y locales en donde simplemente nos ha demostrado que está chambeando y que, los resultados son desalentadores para el Presidente, su equipo de colaboradores y los cocineros de su proyecto (para la vox populi, los cocineros son Salinas de Gortari, José Córdoba Montoya, Pedro Aspe y otros salinistas). El crecimiento económico que proyectó el Presidente de 3.8, lo estamos cerrando entre 1.2 y 1.3, originando desempleo, falta de inversión y descoordinación del gabinete económico, quienes están saturando a la vox populi con mensajes de que viene el año de la eficiencia productiva, de competitividad y de exportaciones; qué bueno que así sea porque el año termina con un pésimo mal fin. La apuesta a la reforma madre, que es la energética que están instrumentando, ya se les hizo bolas porque el mismo Presidente declara que los resultados se verán entre 6 y 7 años y su sexenio termina dentro de 60 veloces meses, consideramos que a esta publicidad gubernamental al estilo salinista, más valía bajarle el tono para que fuera más real porque la salida del PRD del Pacto y la manifestación multitudinaria de AMLO en el zócalo, fue una demostración de que el piso del gabinete peñanietista no está tan firme y, el hecho de que Cárdenas, Ebrad y AMLO tengan un millón 700 mil firmas para frenar la reforma energética en el 2015, a 36 meses de las elecciones, significa que habrá un retraso en la inversión de quienes quieren quedarse con el petróleo del Golfo de México y cambiarle el nombre a Golfo de E.U.

Juan Pueblo, que es la vox populi, está consciente que las reformas estructurales de de la Madrid, Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y EPN han sido para concentrar la riqueza, porque han enterrado el discurso de la justicia social apostándole al neo liberalismo con 31 años del ingreso al GAT y dentro de 30 días EPN estará festejando los 20 de TLC estando a su lado Salinas y haciéndose acompañar de los 30 dueños de este país a quienes van a seguir beneficiando.

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