Por: B. Manuel Villagómez R.
Sí, al lago de Chapala.

En diciembre de 1942, se firmó el primer Tratado Comercial Libre Cambista, solo con los E.U. este tratado de corte neoliberal nos condenó a ser proveedores de materias primas y nos alejaba en lo general de tener un sector industrial, además ante la coyuntura de la guerra, los E.U. deseaban contar en su fronteras con un vecino fiel, seguro y estable, a cambio estuvo dispuesto a que el Eximbank Americano financiara a empresas que pudieran ayudar al imperio con productos que requería ante la economía de guerra y así se apoyo a Altos Hornos, Hojalata y Lámina, la cabeza del Grupo Alfa, Celulosa y Derivados y Fundidora Monterrey; este apoyo originó la división dentro de las fracciones empresariales como la COPARMEX y la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio e Industria (CONCANACOMIN) con sede en Monterrey, conocidos como los duros, la otra fue la central ubicada en el Valle de México hoy CDMX la división es muy radical, estos organismos hablan de menos intervención del gobierno, mientras los del centro solicitan la protección del gobierno. La fracción norteña se opuso al fortalecimiento de la CONCAMIN y de la CANACINTRA. El presidente Ávila Camacho se apoya en los E.U. y se inicia el movimiento en contra del acuerdo comercial, se firma un pacto obrero-patronal entre la CANACINTRA que dirigía Domingo Lavin y la CTM que comandaba Vicente Lombardo Toledano, sus llamados de unidad eran claros porque se referían a la intervención cada día más descarada del imperio yanqui y van en contra del tratado comercial por inequitativo, pues solo se apoyaba a los duros del norte. Se crea un Consejo Nacional Patronal que preside Aarón Sainz de la Asociación de Banqueros que se limitó a hacer un llamado a la concordia. El Plan Obrero Industrial y el Plan de Industrialización, fueron impugnados por la fracción norteña, Lavin de CANACINTRA es acusado de comunista, el PAN hace diputado al banquero y dirigente empresarial Antonio L. Rodríguez y al gerente de COPARMEX Isaac Guzmán, el grupo Garza Sada crea la Liga de Contribuyentes y Usuarios de Servicios Públicos de Nuevo León para control político. La CANACINTRA se fortalece y se crea la CANACINTRA de Jalisco. Llega Antonio Ruíz Galindo y en pleno Congreso acusa a la CANACINTRA, Pedro A. Chapa asesor de Panamerican Airways llega a CONCAMIN y fue opositor de CANACINTRA, lo seguiría en el cargo Guillermo Guajardo representante del Consorcio Garza Sada. Para 1950 la CONCAMIN quedaba en manos del capital extranjero con Edmundo J. Phelan de la Goodrich Company, ejecutivo también de la Compañía Hulera Euzkadi. En los 40, los empresarios se dividieron entre neoliberales y nacionalistas y, al llegar Miguel Alemán, les da a los empresarios las siguientes carteras: para Antonio Ruíz Galindo la Secretaría de Industria; para Antonio Díaz Lombardo y Agustín García la Secretaría de Economía -que revivió Fox- para Nazario Ortiz la Secretaría de Agricultura; el Banco de México para Carlos Novoa, que fue fundador del PAN; para Manuel Gual la Secretaría de Educación Pública. Para estas fechas, las cúpulas empresariales, con algunas reticencias, se van por el proteccionismo en contra del libre cambismo, del GATT y del Tratado Comercial México-Norteamericano de 1942 que finalmente quedó derogado en 1951 y que es lo mismo que tendrían qué hacer ahora, antes de privilegiar nuevamente a los mismos con la renegociación del TLC.

mvrfundacion@gpovillamex.com
fundacion_clcs@gpovillamex.com